A lo largo de nuestra vida, al menos en una ocasión hemos escuchado o escucharemos esta afirmación. Nada más lógico y fácil de entender, con toda seguridad que en carne propia o en la de algún familiar lo hemos comprobado o hasta padecido, ¿entonces por qué no lo dejamos impregnado en nuestro diario vivir?
Diariamente asistimos y somos parte del impacto que a través de mensajes de los medios publicitarios (TV, radio, revistas, redes sociales) penetran sutilmente nuestro cerebro y nos hacen consumidores de comidas, bebidas y otros productos que no son precisamente muy saludables pero que encajan perfectamente en la moda, en la tendencia actual y de esta forma inconsciente empezamos a hacerle juego a algunas enfermedades.
Los que tenemos ya algunos años a cuestas recordamos como en nuestra época de juventud presentaban algunos comerciales en la TV donde un hombre montado en un hermoso caballo encendía un cigarrillo e invitaba a seguirlo porque te convertirías en un hombre deseado, afortunadamente dicho comercial junto a los demás de cigarrillos ya fueron retirados, sin embargo ahora nos inundan con comerciales de comidas chatarras, dulces, gaseosas, que de una u otra forma contribuyen en la alta incidencia del sobrepeso y obesidad , diabetes e hipertensión que presenta hoy nuestra población.
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A esto debe sumarse que en materia de políticas de salud, especialmente aquellas en materia de prevención de enfermedades y promoción de la salud tanto física como mental, los cambios y el impacto logrado a través de los años no son muy significativos, el manejo de la salud por grandes grupos económicos particulares ha convertido en un lamentable negocio nuestra salud y en muchas ocasiones lograr oportunamente conseguir una cita o que se nos mande un examen de laboratorio se ha convertido en algo tan difícil como ganarse una gran lotería.
A todo esto, obviamente habrá que prestarle mucha atención y exigir respetuosamente a quien corresponda los correctivos de cada caso. Sin embargo, hoy quiero hacer un llamado muy especial a el papel que jugamos cada uno de nosotros con nuestra salud y para ello quiero realizarles una serie de interrogantes que espero los analicen con el mayor rigor y traten objetiva y sinceramente de responderlos hacia ustedes mismos, con la esperanza de generar los cambios y actitudes que nos conduzcan a un mejor estado de nuestra salud:
¿Acudes mínimo una vez al año al médico para que te haga una consulta general y te ordene los exámenes pertinentes? ¿O solo lo haces si te sientes verdaderamente enfermo?
Ante algunas enfermedades en nuestros padres, tíos y abuelos en las que la herencia juega un papel importante como Diabetes, Hipertensión y algunos canceres, ¿solicitamos oportunamente a nuestro medico el respectivo chequeo? ¿Si te realizas una citología cada año? ¿Y la mamografía? ¿O si eres hombre mayor de 45 años, solicitas el seguimiento para patología de próstata?
¿Invitamos a nuestros hijos a que soliciten asesoría en temas como planificación familiar y enfermedades de transmisión sexual a nuestros médicos? ¿O sobre proyecto de vida a los psicólogos? ¿Procuramos llevar estilos de vida saludables que involucren dietas especiales y realización de ejercicio rutinariamente?
Ante la sospecha de trastornos alimentarios como bulimia, anorexia, vigorexia, o sospecha de consumo de sustancias psicoactivas buscamos ayuda médica y psicológica oportunamente?
¿Miramos a nuestros médicos y psicólogos como verdugos y no consultamos oportunamente porque la información por ellos dada me la da también mi vecino, o porque yo no estoy loco?
Estos son tan solo unos cuantos interrogantes que debemos hacernos y solucionarlos de la mejor manera siempre pensando en nuestro beneficio. La prevención obviamente es una excelente medida, no solo en cuanto a costos económicos sino y lo que es más importante en la modificación o detención del progreso de algunas enfermedades, déjate contagiar de prevención y promueve verdaderos estilos de vida saludables.
Diego Bedoya González.
Médico especialista en Farmacología Vegetal y terapias alternativas.
Ciclo Vital Medicina Integrativa.
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